viernes, 30 de diciembre de 2016

A noite de saudade

Se acerca la noche más larga del año, la noche más triste, la noche del recuerdo, de la melancolía, cuando la memoria duele y la pena muerde. A noite de saudade.

Ha pasado un año más, con sus alegrías y sus penas, colocamos el punto final al 2016, cerramos ciclo, pasamos página. No voy a hacer un balance del año, como tampoco voy a ponerme metas ni hacer propósitos de año nuevo que sé de antemano que no voy a cumplir.

Sí tengo una lista de deseos, pido tres, sólo tres, uno a cada rey mago.

A Melchor le pido CONSCIENCIA, consciencia para darme cuenta de mis acciones sin dejarme llevar por el día a día ni por las prisas. Consciencia para educar a mis hijos de la forma en la que deseo hacerlo, para cuidar y amar a mi familia, para descubrir y disfrutar de las cosas que son realmente importantes en esta vida. Le pido consciencia para mí y para el mundo, consciencia ante las injusticias, ante las desigualdades, ser conscientes de lo que es bueno y justo en este mundo.

A Gaspar le pido CORAJE, coraje para dejar marchar los recuerdos que duelen, coraje para vivir la vida que quiero, para emprender caminos nuevos, coraje para dejar ir a las personas que no desean estar a mi lado. Le pido coraje para mí y para el mundo, coraje para tomar decisiones, coraje para luchar por lo que es justo, coraje para ser honestos.

A Baltasar le pido CONSTANCIA, constancia para mantener estos deseos, para finalizar todo aquello que inicio, constancia para seguir caminando. Le pido constancia para mí y para el mundo, constancia para seguir luchando y defendiendo nuestras ideas conscientes con el mayor coraje posible.

El día 1 empezamos un libro nuevo: Había una vez… Lo escribiremos en los próximos meses, aún no sabemos qué nos vamos a encontrar. Espero que lo llenéis de cosas buenas, de alegrías, de risas, de paz, de amor y de momentos especiales y espero que los reyes magos os traigan mis tres deseos. Feliz lectura amig@s!


Mamá de Parrulín y de Xoubiña
El año que viene más.

Sean buen@s y felices!

viernes, 28 de octubre de 2016

Buenos y terroríficos días!


Un año más nos hemos volcado en el disfraz de Halloween de Parrulín. Cada año el listón se sitúa más alto, por exigencia propia y por exigencia de mi vástago, que ya tiene fama de buen disfrazador y no quiere perderla. A lo largo de la semana han sido muchos los niños del cole, y no sólo de su clase, que nos han preguntado de qué era el disfraz, la expectación era tan alta como las dudas internas que tenía acerca de la viabilidad de mi idea.

Recuerdo cuando era pequeñito y le disfrazaba de inocente fantasmita, repartiendo  mandarinas de halloween por la calle, los últimos dos años de mi madre coincidió estando ingresada y repartimos sonrisas y alegría por los pasillos del hospital. Me llena de melancolía este recuerdo…


Después de reutilizar este disfraz varios años seguidos pasamos a comprar el típico disfraz de esqueleto del chino, pero son tantos y tantos los niños que van de esqueleto chino que comencé a hacer disfraces caseros. Era la niña tan chiquita el primer año que fueron los dos de Monstruos S.A. Parrulín era Sullivan y Xoubiña era Mike Wazowski. Estaban preciosos, pero Parrulín siguió creciendo y creciendo y prefería ser más monstruoso.

Hicimos un escalofriante disfraz de vampiro con un paraguas


Un tétrico hombre sin cabeza



Y… este año… tachán! Un ojo horripilante!!!!!


DIY Paso a paso: Lo hicimos con una lámpara del chino, pero llevaba un alambre dentro y si lo quitabas para poder meter su cabeza dentro, la lámpara no se sujetaba, así que tuvimos que solidificarlo poniéndole papel de cocina y cola y dejando que secara durante días y días y días… Llegó la hora crítica de recortar el tamaño de su cabezón y probar si se sujetaba! Prueba superada mientras el plan B permanece secando por si fuera necesario.


 Luego pintamos el ojo, con su retina y su pupila



Hicimos unos agujeros que no se noten pero que le permitan ver (importante) y respirar (imprescindible)


Ayer, procrastinando como siempre, le pusimos las venas y la sangre, con papel pinocho y cola. 


Y además hicimos los guantes monstruosos pegando unos ojos a unos guantes con esparadrapo, y pintando el esparadrapo con un rotulador rojo para simular sangre.


Parrulín, antes Ojo que sencillo, decidió que le faltaba un arma, que también la compramos ayer. Por último, manchamos una camiseta de manga larga con un montón de sangre falsa que dudo mucho salga en la lavadora. Un año más, espero que triunfe en el cole con su disfraz de Ojo!

Qué? Cómo os habéis quedado? Jejeje!

Y Xoubiña? Xoubiña está en una edad que lo único que me pedía era un tutú, lleva un tutú rosa, una diadema con calaveritas mejicanas, una corbata rosa con un dibujito de calavera y un collar de perlas rosas, camiseta y leotardos en azul marino. No da ningún miedo pero tengo que reconocer que está muy riquiña. Os quedáis sin foto por privacidad, tendréis que creerme. Os dejo la foto de los chupachus que ha llevado para sus amiguitos.


Mamá de Parrulín
Otro día más.
Sean buen@s y felices.

viernes, 14 de octubre de 2016

Los Ferrari corren en ARCA

Muchas veces he contado cómo nos comunicaron las Altas capacidades de Parrulín y la similitud con un Ferrari, que necesita pista de vez en cuando, pisar el acelerador a tope y disfrutar de la velocidad, de sentir el viento en la cara y despeinarse. Desde entonces hemos probado diferentes asociaciones y actividades culturales. Hoy vengo a recomendaros el mejor sitio donde llevar a los Ferrari: ARCA -Asociación para la Reflexión y desarrollo de la Creatividad y las Altas capacidades.


Esto no es un post patrocinado, es un post de agradecimiento por su labor, por su dedicación, por su cariño, por su trabajo y por poner en ello toda su experiencia y todo su corazón. Es un post para todos los que me preguntáis por privado, para los que buscáis orientación, los que estáis preocupados, los que os sentís perdidos y abandonados por el colegio y por las administraciones públicas.

¿Quién es ARCA? ARCA es una asociación declarada de utilidad pública, integrada por psicólogos, orientadores, pedagogos, científicos, artistas y antropólogos con formación específica en el campo de las Altas Capacidades. Abordan las necesidades de tu hijo o hija desde los principales ámbitos de su desarrollo educativo y personal (psicológico, pedagógico y relacional) con un objetivo primordial: ayudarle a disfrutar de su talento

Preciosa definición de sus objetivos, ayudarles a disfrutar de su talento! Y además es que lo hacen!

¿Por qué ARCA? Porque ARCA  es un lugar donde te sientes cómodo nada más llegar. Te recibe la hermosa sonrisa de Fátima Martí, una gran profesional con muchos años de experiencia en las Altas Capacidades y sobre todo una gran persona, siempre atenta y cariñosa, que nos ha ayudado y orientado en todo momento en este largo camino. Porque la variedad de cursos abarca todos los ámbitos y porque cada año sigue avanzando en su labor ampliando la oferta de cursos. Porque jamás me han pedido un CI ni un informe, cualquier niño que le interesa ir a uno de los cursos es recibido con los brazos abiertos.

¿Qué cursos ofrece ARCA? La variedad es impresionante, nosotros empezamos con el curso de ASTROFÍSICA PARA FUTURAS ESTRELLAS, le encantaba a Parrulín, fuimos a una primera clase y ya no pudimos dejarlo, sólo tenía 6 años. El tema le gustaba, el profesor era fantástico y salía feliz contándome cosas que yo ni sabía. Y sobre todo oírle decir: Mamá! Estos niños leen tanto como yo! Y les interesan las mismas cosas! Tan contento estaba que se apuntó también a MATEMÁGICAS, que ahora se llama MATEMÁTICAS DIVERTIDAS, donde hacían juegos matemáticos que le divertían muchísimo.

Y llegó la Semana Santa, y nos propusieron un CURSO DE ENRIQUECIMIENTO ESTIVAL en el Monasterio de Uclés, basado en la Magia. Parrulín quería ir de cabeza, yo no estaba muy convencida. Es que tiene sólo seis años, es que nunca ha salido de casa… Y la experiencia no pudo ser mejor para él, la convivencia fue inolvidable, hicieron talleres súper interesantes, estaban fenomenalmente atendidos, el ternura y complicidad de todo el personal hacia los niños era impresionante. Es tanto el cariño y el cuidado con el que se los llevan que el ratoncito Pérez visitó a Parrulín cuando se le cayó un diente! Detalles que el niño no olvidará y por los que yo estaré siempre agradecida. 

El año siguiente el tema era la Música, para mi hijo ir a Uclés es un regalo, para mí el regalo es la tranquilidad absoluta de saber que le dejo en buenas manos.

Antes de que emocione más todavía contaros otros cursos programados para este año CURSO DE CINE, CURSO DE MITOLOGÍA GRIEGA, CURSO DE ARDUINO, TALLERES DE EXPERIMENTOS, CURSO DE ESCRITURA CREATIVA, CURSO DE ARTE, CURSO DE DISEÑO EN 3D Y DE MODELADO 3D, CURSO DE DIBUJO, CURSO DE MINDFULNESS…

ARCA también realiza Proyectos de Enriquecimiento Extraescolar en los centros educativos que lo solicitan u ofrece Formación al profesorado, que tanta falta hace!

¿Qué más se puede pedir? Pues pídeselo a Fátima! Le dije una vez que debería apostar por el arte, estudió la posibilidad de hacerlo y este año ha logrado la persona perfecta para ello y ha iniciado el LABORATORIO DE ARTE E IMAGINACIÓN para fomentar las experiencias y habilidades creativas, en conjunción con una educación de la percepción, del juicio, del razonamiento crítico, la opinión y la comunicación, todo ello con el arte como herramienta.

Escuela de padres, consultas y valoraciones de altas capacidades, orientación para padres, educación emocional… para todo esto también puedes confiar en su profesionalidad.

ARCA ha formado un gran equipo donde pueden correr nuestros Ferrari, y su “capitana” Fátima os orientará y resolverá todas las dudas que surjan en esta carrera, los Ferrari necesitan pista, para los padres es más una carrera de fondo.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

viernes, 30 de septiembre de 2016

Educar a los hijos es mucho más que hacer deberes



Empieza un curso nuevo e inevitablemente también se reanuda el viejo debate acerca de los deberes, deberes sí o deberes no. En el colegio de mis hijos sí hay deberes. A partir de primaria tienen deberes todos los días, un día una hoja de lengua y otro día una hoja de mates. La verdad es que a Parrulín no le cuesta más de 10-15 minutos, son muy, muy fáciles, aunque no sé cuánto le lleva a otros niños que no tienen su capacidad. Puede que luego se compliquen pero sólo está en tercero de primaria, bueno, y en cuarto a la vez. (Qué raro es esto, no me acostumbro! Qué curso hace tu hijo? Eh… tercuarto?)

En mi colegio había deberes, no recuerdo desde cuándo, pero sí recuerdo que eran mucho más variados que los de mi hijo, unos días tenía deberes de una cosa y otros días de otra, o de varias, o de ninguna. Tampoco lo recuerdo como algo traumático. Teníamos una profesora o una monja de cada asignatura, ahora tienen la misma profesora para casi todo y se controla mejor la cantidad de deberes. Lo que sí recuerdo traumático eran los castigos que se estilaban en mi época. Escribir en casa “No debo hablar en clase” 200 veces! Unos deberes rancios y poco educativos al más puro estilo Bart Simpson.

Yo trabajo de 8 a 4, mis hijos están en el colegio de 9 a 5. Ellos tienen más tiempo de recreo y de comida que yo, pero son las mismas horas. Lo normal es que yo no me lleve trabajo a casa salvo contadísimas excepciones, considero que el colegio debería de ser exactamente igual. Si no fuera capaz de hacer mi trabajo en mis horas algo estaría fallando, en planificación o en gestión del tiempo. Si no les da tiempo a hacer las tareas de clase, me parece bien que lo hagan en casa. Si necesitan refuerzo en alguna materia en la que vayan un poco flojos, me parece bien que lo hagan en casa. Pero hasta ahí.

Nos dieron a elegir a los padres en una encuesta, entre otras preguntas, si queríamos deberes, desconozco el resultado de dicha encuesta y si era vinculante. Una de las preguntas era acerca del horario escolar en Bachillerato y sí lo modificaron. También preguntaron si sustituir el día del padre y el día de la madre por el día de la familia, que no han cambiado, y otras cosas más que no recuerdo. Me parece genial que decisiones como estas las tomen los padres de forma democrática. Minipunto para el cole al menos por preguntar! (Sabéis lo que no preguntaron pero yo sí cambiaría? El día de San Isidro lo haría el día internacional, tantos niños de otras comunidades y otras nacionalidades y qué enriquecedor sería que pudieran explicar características de su país! El gallego bailando una muñeira, el vasco el aurresku, el brasileño la samba, el argentino un tango… que aprendieran a comer empanada, tacos, cebiches, ratatouille… y no ponerles a todos el mismo disfraz barato y espantoso comprado en el chino!)

Como quiero pensar que la encuesta era vinculante, supongo que salió deberes sí. Tampoco entiendo las familias que defienden los deberes a capa y espada. Hay millones de cosas divertidas para hacer con los niños y millones de cosas que enseñarles, si les faltan ideas no tienen más que ver el nuevo anuncio de Ikea. Minipunto también para el anuncio de Ikea! Si quieres deberes en el sentido estricto, pónselos tú! Hay infinidad de páginas con recursos educativos de todo tipo, del tipo cuadernillo de Anaya o del tipo lúdico-matemático. Tampoco entiendo los deberes del tipo: Leer 15 minutos. Si fuera simplemente leer… pero leer 15 minutos! Te dejas el cuento a la mitad? No lo entiendo.

Es por inculcarles el hábito, dicen los defensores de los deberes. El hábito se hace cuando haya que hacerlo, no veo necesario entrenar el hábito. No tuve el hábito de limpiar cada noche el aparato o las lentillas hasta que no tuve, como no tuve el hábito de pasarme toda la noche dibujando hasta que no entré en la carrera o como no tuve el hábito de comprobar si mis hijos respiraban cada noche hasta que no los tuve!

El otro día estuve hablando con una madre del cole, su hijo es de altas capacidades aunque no tiene el mismo perfil que Parrulín, no es un niño escolarmente brillante, que también hay de todo en las altas capacidades! Hablábamos precisamente de los deberes. “Yo he decidido que mi hijo no hace deberes, el año pasado ya no hizo y este año acabo de comunicárselo a su tutor y tampoco ha habido ningún problema.” Andá! No sabía que se pudiera hacer eso! Pero… por qué no?

La educación que yo he recibido en mi colegio de monjas y la que he recibido en casa era que no se cuestionaba de lo que dijeran en el colegio, salvo que nos dijeran barbaridades como que si copiábamos en un examen y moríamos esa noche iríamos al infierno porque estábamos en pecado mortal. (Sí, en aquella época nos decían esas cosas, que en casa nos desmentían. Increíblemente tampoco lo recuerdo como algo traumático.) Esta herencia hace que, aunque ahora esté en el otro lado, sigo manteniendo un respeto y cierto temor a las profesoras. En la vida se me ocurriría decir que mi hijo no va a hacer deberes. Pero… por qué no? Una vez sí lo hice, fuimos a despedir a un amigo de la familia, a darle el último adiós. Me parecía mucho más importante que hacer tres sumas, escribí una nota a su profe y no pasó nada. Recuerdo cómo envidiaba a una amiga mía porque su madre le hacía un justificante para que no hiciera los castigos de escribir 200 veces. La mía se sentaba conmigo a escribirlo, me animaba y me traía chocolate para hacerlo más llevadero. (Y tengo un surrealista recuerdo de pequeña con mi padre ayudándome a colorear a San Pedro, pero me parece tan rarísimo este recuerdo que no sé si es real, debo de haberlo soñado.)

Cuando estaba en BUP tenía una profesora de matemáticas que nos ponía deberes voluntarios y casi todas los hacíamos! Obligatorios 3/5 como mucho y una hoja con 100 integrales y 100 derivadas extra para el que quiera hacerlas durante la semana. Me lo pasaba fenomenal! Sí, supongo que acabo de echar por tierra mi imagen y me hace parecer una empollona o una friki con gafas. No sé si lo era, y tampoco sería malo, pero realmente disfrutaba muchísimo haciendo integrales y derivadas, me parecía súper divertido, era como un pasatiempo, me picaba hasta hallar la solución. Derivadas, integrales, matrices, límites… me encantaba hacerlos mientras veía a un jovencísimo Jesús Vázquez en Hablando se entiende la basca! Ains! Lo que ha llovido desde entonces!

¿Deberes sí o deberes no? Yo elijo deberes de forma voluntaria y cada uno que haga lo que quiera. Lo que necesitamos no es meternos en discusiones, ni convencer a nadie, ni recopilar firmas, ni llevarlo al parlamento. Lo que realmente necesitamos es que se nos reconozca la capacidad de decidir si queremos hacerlos o no. Decidir cómo queremos pasar las tardes en familia, que se comprenda que educar a los hijos es mucho más que hacer deberes.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

martes, 27 de septiembre de 2016

Todo va a salir bien, mi pequeño Ferrari, yo confío en tí

Hemos comenzado un nuevo curso escolar, los niños estaban emocionados de volver a ver a sus amigos, por su parte todo ha ido bien, y se han acostumbrado rápidamente a las rutinas y horarios. Este comienzo ha sido complicado para nosotros como padres, complicado por una gran decisión que nos hemos visto obligados a tomar.

El primer día siempre les acompaño en el comienzo de su curso escolar, habitualmente los lleva su padre, pero el primer día me hace ilusión estar con ellos. Acompañamos a Xoubiña a su nueva clase de cuatro años y nos presentamos a su profe, una chica pelirroja que parece muy simpática, la primera impresión ha sido buena, aunque igual es por las pecas que siempre me hacen mucha gracia. Xoubiña se queda allí, jugando a su aire y tan feliz como siempre.

Acompañamos a Parrulín a su clase de tercero de primaria, pero no llegamos a conocer a su nueva profesora. Con premeditación y alevosía nos para en el pasillo el equipo de orientación para hablar con nosotros, nos mete en la biblioteca y nos propone que haga lengua y mates con los de cuarto y que en septiembre del año que viene comience quinto completo, de forma que este año sea como una especie de curso puente y una adaptación gradual con los niños del año siguiente.

La primera reacción es de sorpresa, nos lo han propuesto varias veces, pero nunca han llegado a materializarlo, siempre excusándose con que no era posible que coincidieran las clases, que tenían que haberlo solicitado hace meses y excusas varias. ¿Nos orientáis para poder tomar esa decisión? Bueno… tiene su lado bueno y su lado malo, vosotros decidís, cuando queráis nos llamáis y lo hacemos, es inmediato. Ya está aprobado con un niño más pequeño, que irá precisamente a clase del vuestro a lengua y a mates, y el vuestro iría a cuarto. Eh… uf! déjanos pensarlo.

Salimos abrumados del colegio. Me voy a trabajar con la cabeza trabajando a toda velocidad, un nudo en la garganta, un peso en el corazón, retortijones de barriga y algún que otro síntoma más. La no orientación ha sido una constante en este colegio. Necesitamos herramientas para poder tomar esta decisión, herramientas que no tenemos. Y si lo llevamos a un psicólogo que nos aconseje acerca de su madurez? Que decida el psicólogo! No podemos dejar esta decisión en manos de otros, ojalá, pero es NUESTRA responsabilidad como padres, aunque no estaría de más tener una orientación para tomar esa importante decisión.

Estoy muy agobiada, todas las decisiones en la vida tienen sus pros y sus contras, y sopesarlas no es nada fácil. Y saber que va a afectar radicalmente a la vida de mi hijo, para bien o para mal, me angustia muchísimo. Cuando me encuentro tan agobiada me entra la vena melodramática, caigo en picado, entro en un bucle de preocupación y pena, que necesitaría el consejo de una madre que ya no tengo. Y la echo tantísimo de menos que sólo quiero llorar. Desearía su consejo, desearía hablar con ella, pero sobre todo desearía un abrazo y que me dijera que todo va a salir bien porque… porque yo la creería!

Casualidad, o el destino, ese día me encuentro con una profesora de mi colegio a la que tengo mucho aprecio, y nos saludamos muy cariñosamente. Mi madre era muy amiga de su hermana, también profesora del colegio y decido llamarla. Esta profesora me recomienda que lo haga, su hermana que se encuentra en su casa cuando llamo, también recomienda que lo haga, llamo a otra profesora más que es prima de mi madre, también recomienda que lo haga. Tres de tres. Me dicen que tercero y cuarto son muy parecidos, que es muy buen momento para hacerlo, que siempre es positivo para estos niños… Por último, llamo a Fátima, de Arca, que también recomienda que lo haga, los demás me aconsejan como profesoras, Fátima me aconseja como experta en altas capacidades, le conoce bien desde hace varios años, ha convivido con él en los cursos de enriquecimiento. Todas me han animado, Parrulín es un niño extrovertido que hace amigos con facilidad, en caso contrario puede que me lo planteaba de otra manera. Además que este curso un niño suba a su clase en lengua y mates al mismo tiempo que él se va a cuarto es positivo para todos, que lo vean de forma natural en su clase, unos vienen y otros van. También he dado mucha tabarra a algun@s amig@s, sopesando pros y contras, viendo otros puntos de vista... Esta ha sido nuestra orientación, a base de amigas de mi madre y tirando de agenda. No parece muy profesional, esta orientación es la que tenían que haberme dado en el colegio, pero todas estas personas que me han ayudado son personas en las que confío. Por supuesto, hemos contado también con su opinión. Parrulín, nos proponen hacer esto ¿qué opinas? Bueno, vale! Ha sido su contestación, alegre y despreocupada, sin profundizar en el asunto ni darle mayor importancia. Quizá sea así como debería tomármelo yo, y dejar de darle tantas vueltas a la cabeza. ¿Y si deja de ser el niño alegre y feliz que es ahora? ¿Y si es mucha presión para él? ¿Y si no se adapta? ¿Y si los mayores no le reciben bien? ¿Y si algún día nos echa en cara el haber tomado esta decisión? ¿Y si estamos cometiendo un gran error?

Tomada la decisión, la aprobación ha sido un camino complicado con más idas y vueltas de lo necesario, ha tardado algunos días pero ya está hecho. Hoy tenemos la aprobación definitiva, hoy mi pequeño Ferrari irá por primera vez a cuarto en clase de lengua y mates. Mi pequeño Ferrari… Este nuevo curso me llena de miedo, de agobio y de preocupación. Tengo una presión en el pecho que no consigo deshacerme de ella. Y ya no hay marcha atrás. Hoy ha empezado su flexibilización. Y si lo pienso fríamente, en tercero comienzan a dividir, él divide hace tres años, en lengua leerán El lobo lupas 4 en lugar de El lobo lupas 3, cuando él se está leyendo El señor de los anillos! Realmente es tan importante?

Cuando comencé el año pasado el curso de inteligencia emocional el coach me dijo “cuando mires a tu hijo, cuando le abraces, o cuando decidas escucharle para que pueda aligerar su carga, no olvides una cosa… lo más potente que puedes hacer por él es CONFIAR PLENAMENTE en que tiene recursos suficientes para poder superar cualquier situación, si no es ahora, aprenderá y lo hará más tarde, no lo dudes… para ello confía en ti como madre, aunque a veces no creas ser la madre que te gustaría (¿quién lo es?... ), aunque te falten respuestas, aunque te bloquees en ocasiones… recuerda que lo que más alimenta a tu hijo es tu amor, tu intención, tu confianza en él, CONFIA en lo que SI que le estás dando ya, aunque no sea “perfecto” o como desearías.”

Mi pequeño Ferrari tenía dos o tres años cuando me dijo algo que se me quedó grabado en el alma. “Mamá, los problemas de después son para después.” No puedo evitar pensar en un montón de futuribles e hipotéticos problemas, pero lo intentaré. Confiaré en él y en que sabe que estoy a tu lado. Y tengo miedo, y necesitaría el abrazo de mi madre, que me dijera que todo iba a salir bien, porque… porque la creería! Pues eso es lo que me toca hacer ahora, porque ahora soy LA madre. 

Todo va a salir bien, mi pequeño Ferrari, yo confío en ti, puedes hacerlo, yo te abrazo, yo estoy a tu lado, todo va a salir bien.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

miércoles, 31 de agosto de 2016

El cumpleaños de una reina

El lunes mi niña cumplió cuatro añitos! Xoubiña, mi niña con nombre de reina, mi currusquita, mi pequerrechiña, mi amor, mi compañía, mi consuelo, el melocotón de su abuela…

Han pasado cuatro años desde el día que nos vimos por primera vez. Era un bebé sonrosado, rubia y arrugadita. Cuatro años después es una pequeña princesa, blanca como la leche, sigue siendo rubia y ya no tiene arrugas. Yo que nunca me imaginé con hijos blanquitos y rubios, y tengo dos! Me engañaron con eso de los genes dominantes y recesivos, yo tan morena de pelo y de piel, para mí que Mendel debería explicarse mejor!

Xoubiña es muy simpática, cariñosa y divertida, aunque tiene genio también y coge sus berrinches, y tienes que hacer las cosas de una manera determinada, y pretende salirse siempre con la suya… Una niña al fin y al cabo! Una niña que es un rayo de sol, un soplo de aire fresco, es la alegría constante, la música que no cesa, la ternura hecha niña.

Todos los niños tienen algo que les hace especiales. Xoubiña tiene una sensibilidad especial que parece que tiene el instinto de saber si las personas son buenas personas o no. Y lo mismo se lanza a los brazos de alguien que le acabas de presentar como que no quiere ni verlo, según le dice su instinto. Acierta siempre, y yo me fío de su instinto casi más que del mío propio.

Duerme con nosotros, sí, todavía. Y toma teta, sí, todavía. Y son muchos los consejos que tengo que oír al respecto, todos llenos de “deberías”. En Galicia ha dormido en una habitación con su hermano, y son contadas las noches que de verdad se ha dormido allí, y ninguna las noches que se ha despertado allí. En mitad de la noche y a oscuras, salía de su habitación y atravesando el salón terminaba metiéndose en nuestra cama. Y no me preocupa, no hay ningún niñ@ de quince años que duerma con sus padres, cuando esté preparada se irá. Y la teta, aunque tampoco nunca me imaginé seguir dando teta a esta edad no se la voy a quitar por la fuerza, tampoco ningún niñ@ de quince años toma teta. Cuando tenga que ser, será.

Es una niña muy lista, no sé si será muy inteligente como el hermano porque a su edad Parrulín leía, sumaba, restaba… Nos sorprende más ahora las cosas que hacía Parrulín, ya que antes no teníamos con quien comparar. Xoubiña es que no sabe ni las vocales, no acierta ni una y eso que además de en casa se supone que en el colegio lo había aprendido ya, creo que es que no le interesa en absoluto. Sin embargo es mucho más lista que el hermano. Es astuta, despierta, intuitiva, sabe relacionarse con los demás creando feeling, y se las sabe todas. El hermano es más inteligente pero más básico, más primario, más elemental. Tiene un pico de oro, en eso coincide con el hermano, no callan ni debajo del agua. Se expresa con un vocabulario que no corresponde con su edad, a veces te quedas un poco sorprendida con las palabras que utiliza y las cosas que le gustan.

Es muy musical, siempre está cantando o tarareando alguna cosa, a veces inventadas, a veces en inglés, inventado también. Le gusta mucho ver vídeos de canciones infantiles y es capaz de cantar letras larguísimas de memoria. Canta y baila a todas horas. Es muy presumida, irá con la edad, porque desde luego no es por imitación de la madre. Le gusta escoger su ropa, le encanta un tutú, las zapatillas con luces le apasionan, el brilli-brilli es lo más, le entusiasma ir a un pintacaras, que le echen colonia y cualquier cosa un poco femenina le fascina.

Anoche le preguntaba qué quería ser de mayor. “De mayor quiero ser mamá, y tener hijos, si vienen. Crees que los cuidaré bien?” Estoy segura de ello, cariño. Pero cómo que si vienen? “Si, si vienen a mi barriga.” Ah, y sabrá ella que a veces no vienen? O cómo se le ha ocurrido añadir un condicional a ser mamá? Me encanta que quieras ser mamá, es maravilloso! Y además de ser mamá en qué te gustaría trabajar? “Pos… eso no sé, ya lo pensaré”

Ser mamá es lo mejor del mundo! Doy gracias cada día por tener dos hijos maravillosos, preciosos, sanos, alegres y cariñosos. Es un inmenso privilegio poder acompañarles en su crecimiento, participar en el descubrimiento de la vida. Ser mamá es amar sin medida, reír sin motivo, cantar sin vergüenza, bailar sin música. Feliz cumpleaños pequeña Xoubiña, gracias por ser mi hija!

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

jueves, 25 de agosto de 2016

Vacaciones en cuarentena

Se acabaron nuestras vacaciones, hemos vuelto a trabajar. Hay sueño en mis ojos, arena en mis bolsillos y preciosos recuerdos en mi corazón de este verano. Empecemos por el principio, el comienzo de mis vacaciones ha coincidido con mi cumpleaños y he entrado en cuarentena.

Me gustaba cumplir años y celebrarlo, disfrutaba mucho de ese día. He celebrado cumpleaños familiares, estando de campamento en Comillas, con la familia de Irlanda… Siempre eran especiales, incluso un cumpleaños que pasé entero en un aeropuerto esperando un vuelo. Hasta el día de mi cumpleaños en el que recibía mi madre su primera quimio llevé velas y tarta al hospital, disimulando una alegría que estaba lejos de sentir. Y desde entonces no había vuelto a disfrutar de mi cumpleaños, me sumía en una profunda tristeza celebrarlo sin que estuviera a mi lado la persona que me dio la vida.

Han llegado los cuarenta y me he empeñado de nuevo en disfrutar de ese día, sólo quería celebrarlo y recuperar esa alegría perdida. Y lo hice, en compañía de mi santo, de mis hijos y de mis amigos, con quien quería estar, y en mi casa de Galicia, donde quería estar. Y es que los cuarenta sólo se cumplen una vez.

Impresiona la cifra, cuarenta, CUARENTA! Son muchos años, y creo que va a ser una buena década. Los niños crecen, Parrulín con ocho años está hecho casi un hombre, la pequeña Xoubiña ya no necesita estar pegadita a mí en cada momento, el lunes cumple cuatro años y aunque sigue durmiendo conmigo y sigue tomando teta (quién me lo iba a decir!), cada vez es más autónoma. Y no me quejo de apego y cercanía, pero agradezco poder leer un libro, o unas páginas al menos, mientras los veo disfrutar en la playa. Siento que es el comienzo de un nuevo capítulo en mi vida, me siento más madura, más segura, más fuerte, más… real. No sé traducirlo en palabras, pero me siento bien.

No añoro los veinte, lo bien que lo pasaba, los años de carrera, las juergas que me corrían entonces… No, lo pasé y lo pasé bien, pero no volvería. Tampoco añoro los treinta, los embarazos, los bebés, los pañales, las primeras sonrisas, los primeros pasitos… No, lo pasé y lo disfruté muchísimo, pero tampoco volvería. Todas las etapas tienen su momento, sus luces y sus sombras. Siempre he pensado de esta manera y ahora todavía con más razón, volver atrás significaría volver a perder a mi madre y no me siento capaz de volver a pasar por todo ese sufrimiento. “Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace el camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino sino estelas en la mar (…)”

Mi madre decía que los cuarenta eran la edad perfecta para la mujer, que habían sido los años que más había disfrutado, que los hijos ya no la necesitábamos tanto y ya no tenía esas inseguridades que inevitablemente acompañan a la juventud. Yo nunca me había parado a pensar cómo sería mi vida a los cuarenta, ni cómo sería mi cuerpo, mis arrugas o mis canas. Es cierto que en mi adolescencia (y más allá) tuve todas esas inseguridades, a pesar de que entonces era más joven, más guapa, más delgada…

A los cuarenta mi pecho cada vez es más pequeño, cada vez está más abajo, o ambas cosas a la vez, y es por haber servido de alimento y de cobijo. Mi tripa tiene algunas estrías en torno al ombligo, y es por haber creado vida y amor. Mis ojos tienen algunas arruguillas, y es por las veces que he reído y he llorado. Mi pelo tiene canas hace años, y cada vez aparecen más, una amiga me decía este verano que tengo mucha personalidad como para teñirlo, y aunque la razón fundamental es la falta de tiempo, puede que no me lo tiña más, es como es. El paso del tiempo en las personas es el reflejo de lo que han vivido, y cuenta nuestra historia, con sus cicatrices, sus alegrías y sus penas.

A veces vemos mejor cómo pasa la vida por nuestras amigas que por nosotras mismas. He visto cambiar a algunas de mis amigas, las he visto madurar y convertirse en mujeres casi de repente y no me imaginaba que ese tiempo también llegara para mí. Ha llegado pero tan despacio que no me daba cuenta. Y ya no soy una eterna adolescente que juega a ser mamá desempeñando su papel de la mejor forma posible, temiendo constantemente estar a la altura de las circunstancias.

Cometo errores, tengo defectos, pero también más seguridad en mí misma y en lo que hago. Ya no finjo lo que no soy, ni meto barriga, ni disimulo arrugas, ni pinto canas. Elijo con quién quiero relacionarme y mantengo las distancias con quien no quiero hacerlo. Lucho por lo que considero importante y perdono rápidamente lo que no lo es. Descubro la maravilla de las pequeñas cosas, una mariposa, una mirada, una sonrisa, un poema “Amo todas las cosas, no sólo las supremas, sino las infinitamente chicas (…)”

Me siento mucho más a gusto y más fuerte que nunca. He vivido cuarenta años, he ganado muchísimo, he perdido demasiado, he aprendido, he madurado.

Tengo cuarenta años. Soy mujer, soy madre, soy esposa y… soy real.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

miércoles, 29 de junio de 2016

Un suspenso equivocado

Lo del colegio de mis hijos es de traca, que diría mi madre. Es todo como una broma surrealista, y menos mal que me lo tomo a risa, que si no… ¿Habíais oído hablar del caso del suspenso equivocado? Yo he tenido aprobados que pensé que se habían equivocado, de hecho una vez aprobé una asignatura de la carrera a la que no me había presentado! Pero suspenso equivocado no he tenido nunca, quizá injusto, depende de quién lo valore, pero equivocado ninguno.

Es media mañana, estoy trabajando y recibo una llamada del cole, en cuanto veo el nombre del colegio en la pantalla del móvil me entra la taquicardia, nunca augura nada bueno. O tienen piojos (deberían tener apuntado que me da taquicardia cuando me llaman, porque asustarme así y que sean piojos, que me lo digan cuando los recoja) o tienen fiebre (deberían tener apuntado que le den apiretal, que lo autorizo, y si no hace falta más que me lo digan cuando los recoja) o se me han descalabrado (deberían tener apuntado que en ese caso me llamen inmediatamente) A ver qué ha pasado ahora. Respiro profundamente antes de recordar… que se ha acabado del cole! Bien! Eso me tranquiliza, respondo la llamada con otro ánimo y sin taquicardia.

Es la profe de inglés de Xoubiña, un amor de mujer, encantadora. Me dice que está preparando el informe de ella y que ha visto que había un error en las notas que me dieron el otro día. Xoubiña tenía todo conseguido menos Participa activamente en cuentos, canciones y teatros con gestos y acciones que estaba En Proceso, cosa que me extrañaba mucho.

Me dice que ese ítem (que notas más sofisticadas hay ahora, con lo fácil que era el Progresa Adecuadamente) está más que conseguido, que Xoubiña es la estrella de la clase, la que más canta, la que más participa, que le encanta absolutamente todo lo que hacen en clase de inglés y que su actitud es siempre estupenda. La verdad que estaba muy agobiada la mujer y me pidió disculpas un millón de veces, lo estaba pasando peor ella que yo.

El suspenso no era tal, sino un error de impresión. Pero eso significa que la explicación que me dio su tutora de ese suspenso era totalmente inventada! Eso es lo peor, que se lo ha inventado! Alucino! Es su tutora y pasa la mayoría de las horas con ella, y tienen una profesora de inglés diferente que les da al menos una hora al día, algunos días dos, y les cuida los recreos hablándoles en inglés. Entiendo que su tutora no sepa exactamente qué sucede en una asignatura que no es suya, aunque deberías saberlo si hay un suspenso y es su tutora. Pero lo que no entiendo de ninguna forma es que se lo ha inventado!

Cuando le pregunté a su tutora me dijo que era porque si en clase de cantar no le apetece, pues no canta, y si le apetece cantar cuando está pintando, pues canta, y que eso sucedía sobre todo en inglés. En casa canta a menudo en inglés, inglés al revés la mayoría de las veces, pero inglés, y cantar, canta, mucho. Su especialidad es Head, and shoulders, knees and toes, y están también los little monkeys jumping on the bed, algo de un tuna fish que no entiendo muy bien, y otras que no entiendo nada pero ella dice que es en inglés, y los gestos los hace todos, todos. Además a la profe de inglés la adora, cuando la ve sale corriendo a abrazarla, tampoco parece la respuesta de una niña que no tiene buena actitud en esa clase.

Errores cometemos todos, pero hay errores y errores. Que Xoubiña no cante cuando tienen que cantar no es preocupante pero… y si fuera Parrulín el que suspendiera por ejemplo, matemáticas? Una bronca descomunal le cae así para empezar, se queda sin Tablet todo el verano o una buena temporada al menos, si le hubiera apuntado a un campamento me pensaría borrarle… Porque además el pobre intentaría convencerme que era un error y no le creería ni de broma! Encima le castigaría el doble, por suspender y por mentir! Luego ya iría lo de la inteligencia emocional, el ponerme en su lugar, comprender el motivo, sus dificultades, qué necesita, etc, pero después. Para empezar le cae una bien gorda. Cuando me llamaran del cole para decirme Ah, que lo has metido en un internado, pero si el suspenso era una broma! Jaja! Seguro que me partía de risa, vamos.

Lo más honesto sin duda habría sido decirme que le preguntara a la de inglés, y habría salido de dudas y resuelto el suspenso equivocado en un momentito. Pero la tutora ha preferido tirar de imaginación. Y eso es lo que me cabrea de verdad. Y ya son varias "causas pendientes" las que tengo con este cole. Ya tengo las notas buenas, que al menos han tenido la deferencia de enviármelas por mail y no hacerme ir allí a buscarlas. Anécdota y cabreo de final de curso: el suspenso equivocado.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

miércoles, 22 de junio de 2016

Crónica del enésimo enfrentamiento con la burocracia escolar por la adaptación curricular de mi hijo a la que… ¿sabías? Tiene derecho legal!

Ayer era el último día de clase y hoy tenía que ir al colegio a recoger las notas, a las 10:30, una hora estupenda para cualquier madre trabajadora. El menor de los problemas de hoy, en realidad. Primero las de Xoubiña, me cuenta su profesora que salvo en algún momento puntual ha sido siempre una niña muy feliz, que se adaptó muy bien desde el primer día y que no ha tenido ningún problema con ella.

Ojeo las notas a toda prisa buscando si había algún En proceso. Todo Conseguido menos uno: Participa activamente en cuentos, canciones y teatros con gestos y acciones. En serio!!? Su profesora me dice que Xoubiña si en clase de cantar no le apetece, pues no canta, y si le apetece cantar cuando está pintando, pues canta. Ah, cara de póker por mi parte.

Xoubiña es un espíritu libre! Pues estoy encantada que haya suspendido esto, qué voy a pensar! Que tiene tres años y ya tendrá tiempo para que le pongan un corsé y la obliguen a todas estas pamplinas, no digo que no sean necesarias, pero pamplinas al fin y al cabo. Los temas “serios” que son las vocales y los números hasta el 3, conseguido, es un nivel de exigencia tan, tan bajo, que no esperaba que no lo supiera. Y reconoce el naranja, conseguido también, es como de broma. Alguna recomendación para el verano? Que se divierta. Ah, mira, esta es una buena respuesta, qué raro. Me voy corriendo a la clase de Parrulín.

Mi pequeño Ferrari, todo sobresalientes y algún notable, como era de esperar, pero lo que de verdad me interesa son los comentarios de su profesora de cara al curso que viene, porque es la coordinadora de primaria y aunque no sabemos aún quién será su profesora el próximo curso, esta señora seguirá siendo la coordinadora, así que algo tendrá que decir al respecto.

Le he hecho un checklist de las propuestas que me hizo la Orientadora de Estudios cuando eché un Órdago a la grande. Flexibilización de contenidos, Aprendizaje por proyectos, Niño tutor y Refuerzo de áreas con menos capacidad

Anda! Que no se ha cumplido ninguna!!!! Vaya por Dios! Si ya veía yo que no podía ser verdad. Creo que la Orientadora de Estudios tenía mucho interés, y que lo que ella me proponía es más o menos lo que se propone en todos los manuales. Es una chica joven y parece que con ganas. Su error, proponer cosas que no estaban en su mano. Error garrafal, de principiante. Desglosamos este checklist.

Flexibilización de contenidos: Adaptar las lecturas a sus capacidades. Tienen una biblioteca en clase, libros todos del tipo de barco de vapor, ninguno de su nivel de lectura. Eh, eh! Que esto era taaaaaaaaaaan fácil como traerse libros de otra clase! NO SE HA REALIZADO

Aprendizaje por proyectos: Proponer a Parrulín la realización de un proyecto. NO SE HA REALIZADO

Niño tutor: Ayudar a otros niños de su clase con los problemas de aprendizaje que tengan. Este se ha realizado pero no como me lo proponían. Hay dos niños en su clase que son muy conflictivos, que pegan en el patio y con los que han tenido problemas en varias ocasiones. Casualmente a los dos los han puesto a su lado, de tres compañeros que ha tenido este curso. Otras madres me han comentado que sus hijos les han contado que como Parrulín es tan bueno le ponen a los peores a su lado para ver si los reconduce. NO SE HA REALIZADO Y prefiero no ahondar en este tema, que me cabrea muchísimo! Más que todo lo demás.

Refuerzo de las áreas con menos capacidad: Como no hay áreas con menos capacidad que no sea la psicomotricidad, pues nada. NO SE HA REALIZADO

Y me propone la profesora, atención, hacer una aceleración parcial. Es decir, que haga las asignaturas troncales en el curso siguiente y las demás con sus compañeros, y el próximo año le cambiarían al curso superior ya para todo. Es como hacer un curso puente, y luego incorporarse al siguiente. Sabes que esto tenías que haberlo solicitado en el mes de marzo? Ah, bueno, pues si eso ya para el curso siguiente. Es la tercera vez que me proponéis lo mismo, la primera pedí asesoramiento de pros y contras, pero acepté, ni me asesoraron ni lo hicieron, me lo propuso también la Orientadora de Estudios, no pedí un asesoramiento que no me iban a dar, pero acepté, además avisé del plazo para solicitarlo cosa que debería saber ella, no yo, no se hizo. Y lo propones otra vez sin saber ni que tenías que haberlo solicitado ya! De verdad que una trata de ser calmada, de tener una actitud de madre comprensiva, de poner cara de póker, pero es que me lo ponéis muy, muy difícil! Coño! Que es imposible que me vuelva Zen por mucho que me lo proponga!

El único compromiso real y tangible que he obtenido de esta profesora es el de informar a la profesora del curso siguiente para que no tenga que volver a explicárselo yo de cero y perder al menos hasta noviembre. La adaptación curricular comenzará a ser posible en secundaria este año, por fin van a coincidir las clases en un curso y en el otro para que se pueda hacer, en primaria para el siguiente. Acaba de terminar 2º, se supone que podría hacer 4º y 5º a la vez, e incorporarse después a 6º. Ni confío ni lo espero, aunque estaré pendiente para llamarlos en marzo.

Además me da un minilibrito ridículo para que Parrulín haga un resumen del libro que se lea este verano. Ya no me queda cara de póker, lo siento, me hace tanta gracia que suelto una carcajada. Me lo estás diciendo en serio? Por una vez lo ha comprendido y también se ríe. Ya, ya sé que para tu hijo esto es como una broma, pero es una iniciativa de animación a la lectura. ¿Me puedo llevar varios? ¿Cuántos libros calculas que se podría leer tu hijo este verano? Mmmmm… si pudiera comprárselos al mismo ritmo al que se los lee… tres meses de vacaciones, como mucho muchísimo dos días por libro si es bien, bien gordo, eh… unos 45 o así. La cara de póker esta vez es suya.

Bien, pues ahí andamos, que menos mal que el niño es feliz y no tiene problemas porque en cuanto a sus derechos.. Me estoy hartando de darme cabezazos contra las paredes, las instituciones, la burocracia, etc… Prometí que nunca me rendiría de luchar por la adaptación curricular de mi hijo a la que… ¿sabías? Tiene derecho legal!

"Los que renuncian son muchos más que los que fracasan" Henry Ford

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

jueves, 9 de junio de 2016

Nunca sabrás lo que te quiero hasta que seas madre

Mi madre solía decirme Nunca sabrás lo que te quiero hasta que seas madre. Y sí lo sabía, siempre lo supe. Éramos muy diferentes, ella era una mujer hecha de tristeza, ternura, calma y sensatez, y yo todo lo contrario, soy alegre, impulsiva, desordenada, descerebrada. Teníamos una conexión mágica y especial que iba mucho más allá que la relación madre-fija, sí lo sabía, sí, pero pude darme cuenta de muchas más cosas cuando fui madre. La recuerdo esperando a que terminaran de coserme en la puerta del quirófano y haciéndome señales a través de la ventana ¿Estás bien? Siiii ¿Has visto a mi hijo? ¡Que ya soy madre!

Hoy hace ocho años de aquello, hoy es mi cumplemadre, el pequeño Parrulín está de cumpleaños. Ya no es tan pequeño. Mi primer bebé, le nacieron por cesárea, era enorme y precioso. Cuando lo cogí entre mis brazos me miró y me cogió el dedo con sus manitos, como diciéndome quédate conmigo. Me conmovió y supe lo que era el amor de verdad, el que no tiene condiciones, supe lo que era entregar el corazón a otra persona, para siempre. Y comprendí lo que quería decir mi madre.

Mi niño lindo, mi Parrulín, era un precioso niño pequeño. Comenzó pronto a hablar, comenzó tarde a caminar, siempre ha sido un niño despierto y alegre. Su pelo ha ido cambiando de ser rubio como el sol a tener el color del trigo en otoño, sus ojos no han cambiado. Sigue mirándome con esos ojos tan abiertos, tan vivos y despiertos, unos ojos en los que se puede leer su sensibilidad y su inteligencia. Sigue conmoviéndome el corazón cuando me mira.

Mi niño bonito, mi Parrulín, contigo aprendí a ser madre. Tuve una buena maestra, mi madre me enseñó tantas cosas… y contigo las aprendí. Aprendí a amarte de manera infinita, a cuidarte, a mirar de nuevo la vida a través de los ojos de un niño, a maravillarme con las pequeñas cosas. Aprendí también lo que es el miedo, que dejaras de respirar, que te cayeras del tobogán, que te hicieran daño…


Es hermosa la vida como madre, y no podía tener mejor compañero que Parrulín. Cierto que a veces me saca de quicio, pero el balance de estos ocho años de madre es positivo. Ser madre no me define, pero sí me caracteriza, está tatuado en mi piel. Ha suavizado mi carácter, aumentado mi paciencia, despertado mis ganas de jugar y de aprender y, sobre todas las cosas, ha desbordado mi capacidad de amar.

Con sus últimos latidos le pedí a mi madre que cuidara de mis hijos, siento que lo está haciendo bien y que de alguna forma me acompaña. Nunca sabrás lo que te quiero hasta que seas madre, decías. Sí lo sabía, madre, sí lo sabía, pero lo aprendí de nuevo. Gracias.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

martes, 7 de junio de 2016

Cómo tener un día perfecto sin proponérselo

Comienza el lunes demasiado temprano, son las seis de la mañana cuando suena mi despertador, voy preparando la ropa de los niños, recordando que han cambiado el horario de gimnasia de Parrulín en este mes de junio y debe llevar el chándal y repasando el largo día que me queda por delante. El lunes pasado tuve que ir corriendo al cole porque el niño se abrió la cabeza con un radiador, tres grapas en la cabeza, a ver qué me espera este lunes! Comienzo el lunes ya cansada.

Salgo de casa a las siete, con tiempo suficiente para tomar un primer café que despeje mi cabeza. En el cercanías me pongo algo de música que me alegre el corazón, elijo Faltriqueira, canturreo bajito, acompaño el ritmo con el pie y sonrío sin darme cuenta, me miran raro, “Porque estou aquí cantando, empezan a marmurar, non me marmures rapaza, que logo che ha de tocar.” Consigo sentarme y crocheteo un poco más un chal que me estoy haciendo para las noches de verano en Galicia, me tiene absolutamente enamorada esta lana Katia Azeca Fine 210. Me imagino con mi chal, paseando al anochecer por la orilla del mar y vuelvo a sonreír sin darme cuenta.


Un poco antes de las ocho enciendo el ordenador, me preparo un segundo café mientras consulto los mails recibidos y los temas pendientes. Estamos en plena auditoría, en cualquier momento de esta semana me llaman para que explique al auditor mi trabajo. Aun así me sorprende cuando me llaman para que baje a las salas de reuniones a media mañana. Muchas preguntas, muchas respuestas, y un comentario final: Un trabajo impecable. Cuando salgo de allí parece que he crecido un palmo más, lástima mi sueldo no vaya a subir en la misma proporción pero me quedo con la satisfacción de un trabajo bien hecho. Impecable, ahí es nada! Vuelvo a mi sitio sonriendo.

A las cuatro de la tarde salgo corriendo para ir a buscar a los niños, aunque hace calor está nublado, me acuerdo de Yaiza y elijo la compañía de Sés en el mp3, “Se non sal o sol á rúa, saio eu no seu lugar, escolliu moi mala egua quen me queira desbravar”, acompaño el ritmo con la cabeza y sonrío tarareando, hoy me ha dado por música gallega, serán las ganas de irme de vacaciones. En la puerta del metro me dice un chatarrero Guapaaaa! y me alejo sin darme por enterada. Hacía tantos años que no me echaban un piropo por la calle que en lugar de hacerme ilusión pienso “Que Dios le conserve el oído, porque la vista…” Y suelto una carcajada, pensar así significa que me hago mayor!

Es un placer recoger a mis hijos en el cole, siempre se muestran contentos de verme, me abrazan, me sonríen, disfruto mucho de ese momento que los conflictos ya vendrán después. Nos vamos a casa en el metro, no recuerdo qué hace Xoubiña que Parrulín le dice que es una rebelde. “Sí, soy rebelde” dice ella toda orgullosa sin saber realmente qué significa. ¿Sabes? Hay una canción que dice “Yo… soy rebelde porque el mundo me ha hecho así…” de una chica que se llamaba Jeanette. Me hago mayor, ya no me cabe la menor duda! La buscamos en el teléfono y le encanta, el resto del camino va cantándola sin parar. La gente se parte de risa al ver una rubia despeinada de tres añitos cantando a media lengua “Yo… soy rebelde porque el mundo me ha hecho así…” Está divertidísima y yo también sonrío. Para los que también os hacéis mayores:


Por el camino pasamos por la tintorería y por la zapatería, les meto prisa porque les he convencido de la importancia de ordenar el salón con la promesa de que si está todo recogido y limpio hacemos un escondite estupendo donde nadie les encontrará nunca. Hace tiempo que tengo en mente hacer una casita con el mantel de la mesa. Aunque mi mesa es redonda, aún no sé cómo lo haré, para ayer sirvieron un montón de globos debajo y un mantel cualquiera cubriéndolo todo. Imagino cómo quedará este nuevo proyecto y sonrío. ¿Cómo? Pues haré lo que pueda, esta es mi inspiración aunque ni loca llego a este nivel, es una pasada! A qué niñ@ no le gustaría jugar aquí?


Ordeno todo, recojo mil cosas y paso la fregona. Mientras seca el suelo y para que no se levanten del sofá, hemos preparado una “tartas de taza”, las nuestras son de polvos, directamente compradas en el supermercado. No hay nada mejor que terminar la tarde comiendo una tarta de chocolate. No volveremos a comprarlas, las próximas las haremos nosotros con esta receta de mimodemami. Un descubrimiento esta mami, sabe hacer de todo y hace que todo parezca fácil de hacer, además.


Se duchan rápidamente con la ilusión de esconderse bajo la mesa, imaginan y planean la forma de sorprender a papá. Él entraría y preguntaría ¿Y los niños? Y yo tenía que responderle ¿Qué niños? Los nuestros! Andá! Me los he dejado en el cole! Y ellos saldrían y le sorprenderían, o eso creen ellos. Mi santo se retrasa, la sorprendida soy yo porque se pasan más de media hora escondidos bajo la mesa ¡en silencio! Ha sido buena idea! Cuando llega el padre dice ¿Por qué has puesto el mantel? Y lo levanta para encontrar a los niños debajo. No ha salido como esperábamos pero ha sido divertido, nos hemos reído todos.

Después de cenar nos vamos a la cama, leo a Xoubiña los tres cerditos y Fostín, se duerme rápidamente. Me quedo leyendo un rato. Al apagar la luz pienso en la importancia de las pequeñas cosas que nos hacen sonreír, en lo bueno que es disfrutar de estos pequeños momentos. Vaya día más bueno he tenido, sin proponérmelo!

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

lunes, 23 de mayo de 2016

Dicen las malas lenguas…

Dicen las malas lenguas… que la primavera ha comenzado hace tiempo y que el curso escolar está ya a puntito de finalizar. Me resulta increíble y me acuerdo cuando era una niña y el curso escolar parecía que duraba una eternidad y ahora parece que vuela desde la perspectiva de esta madre descerebrada a la que le parece que la Navidad fue ayer, o anteayer como mucho.


Parte de culpa tendrá Fostín, que es un cuento muy simpático (aunque se me hace un poco cansino ya) que se llama Mi árbol de Navidad. Cada noche tengo que leer dos libros a Xoubiña. Es una niña muy cabezota, le gusta que haya un orden determinado en las cosas y cuando se las alteras se enfada bastante, así que tienen que ser dos. El primero de los cuentos es más o menos negociable, según el día que tenga la niña, el segundo tiene que ser Fostín. Siempre. Desde Navidad. Y esta pobre madre descerebrada, no puede asimilar que el verano se acerca ya peligrosamente.

Tan peligrosamente se acerca el verano que esta semana tengo la agenda completa de las exhibiciones de las clases extraescolares. El día de la exhibición de judo, donde harán unos combates para enseñarnos lo que han aprendido y le darán a Parrulín el codiciado cinturón Blanco Amarillo! Ole! Anda que no está contento el niño, tanto como orgullosa la madre! “Si no tenías los puntos suficientes el profe te los regalaba, sólo para que pudieran cambiar de cinturón, pero yo me lo he ganado de verdad, eh mamá?”. Es lo que tiene esto de los cinturones de colores, yo lo comprendo.

Tenemos también la exhibición de danza de Xoubiña, cuando la vea en el escenario con su tutú rosa se me caerá la baba con ella, sólo con ir a buscarla cuando sale de danza ya me enternezco, me la comería a besos cuando la veo así vestida y casi, casi se me olvida cuando se tira por los suelos en pleno berrinche de rabieta tardía. No tengo muy claro en qué consiste la actuación, sus explicaciones dan para poco. “Vamos a salir de detrás de las cortinas a gatas rugiendo como leones!” Ah, qué bien, con lo limpias que suelen estar las cortinas de ciertopelo de los teatros escolares, y con lo bien que le va a sentar a tus enésimas medias rosas que te arrastres a gatas por el escenario. En fin, que se divierta, que yo lo grabo todo como los japoneses y luego, si eso, ya lo veo en casa mientras desinfecto la niña y las medias rosas.

Tercera exhibición, Parrulín en el Experimenta, esta es una extraescolar para niños de altas capacidades aunque no hace falta que seas de altas capacidades, es la excusa que pone el colegio para decir que atienden a las altas capacidades. Extraescolar y de pago, toma ya la atención a las altas capacidades! Han hecho cosas muy chulas este año, experimentos, algo de programación, construir un robot, y actualmente están en pleno rodaje de una peli que me imagino será lo que nos pongan cuando vayamos los padres. Y no nos lo podían dar en un USB para verlo en casa? Con esta y la anterior, podíamos hacer una sesión doble de cine, yo pongo las palomitas.

Lo que también se ha terminado esta semana es el PEAC. El sábado nos hicieron los niños una presentación, firmamos la continuidad en el programa para el año que viene y nos dieron el informe final de curso. Estoy muy contenta del funcionamiento de este programa de la Comunidad de Madrid, aunque sigo insistiendo en que donde hay que actuar es en el colegio. Ya me las había arreglado yo para que mi pequeño Ferrari tuviera pista los sábados en Arca, esto está muy bien y es gratuito, eso que me ahorro, pero lo importante es el día a día en el colegio y ahí las cosas siguen igual.

Dicen las malas lenguas… que la primavera ha comenzado hace tiempo y que el curso escolar está ya a puntito de finalizar. Y me lo voy a tener que creer. En la última sesión de educación emocional me dicen que es la última, me pilla por sorpresa y me da un ataque de pánico. Noooo! Y cómo supero yo ahora tres meses de vacaciones escolares sin el apoyo de estas clases? Cómo se llama una persona que enseña educación emocional? Es un coach? Ostrás! Que tengo un coach! Que acabo de darme cuenta! Cómo mola! Pues sí, soy una descerebrada, pero tengo un coach! Suena a pija, a mechas rubias, a pendientes de perlas, a calle Serrano… Todo eso va a ser que no, yo soy más de pelo indómito y raíces perennes, de olvidarme los pendientes en casa y de comprar ropa en mercadillos. Pero me gusta cómo suena: Tengo un coach. Queda sexy, hay que poner morritos para decirlo, couuuuch, couuuuch, couuuuch. Prueba, prueba! Je, je. A que mola? Couuuuch, couuuuch, couuuuch.

Las malas lenguas que digan lo que quieran que yo seguiré leyendo a Fostín cada noche si no hay más remedio. Y si en algún momento alguien descubriera que soy una descerebrada le sorprenderé diciendo que tengo un coach! Poniendo morritos, eso sí, que queda muy sexy.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.
Otro día más.

jueves, 14 de abril de 2016

A menudo los hijos… salen bolcheviques

Hoy es el 85 aniversario de la II República y hoy vengo a contaros que a menudo los hijos… se nos parecen.

Parrulín estuvo en un Curso de Enriquecimiento en Semana Santa en el Monasterio de Uclés. Además del Curso propiamente dicho, de donde vino fan absoluto de Charles Chaplin, de Buster Keaton y del rock and roll, le enseñaron un montón de cosas, pero una de las que más impresionado le dejó fue la historia del Monasterio de Uclés.

Al estallar la Guerra Civil Española en 1936, el monasterio queda en zona republicana y el ejército lo convierte en hospital, tras la Guerra Civil es ocupado por el bando nacional y utilizado como cárcel hasta que en 1949 se inaugura el Seminario Menor Santiago Apóstol. En 2012 el Monasterio de Uclés se abre a su función actual, para visitas turísticas y para la celebración de convivencias, campamentos, encuentros, cursos de enriquecimiento, etc.

Le habían enseñado al niño desde dónde tiraban los francotiradores, descubrió los agujeros de metralla de sus muros, aprendió que en toda su historia nunca fue vencido por la fuerza debido a su posición elevada, que sólo habían podido conquistarlo mediante el engaño y volvió hablando de la guerra civil, de metralla, de maquis y de bandos, sin tener muy claro quién era cada uno.

Cuando empezó a hablar de ello le puse un disco de mi madre de canciones de la República y le encantó, escuchó a diferentes cantautores, entre ellos a Quilapayún y le gustó especialmente El pueblo unido jamás será vencido, la canta ahora a todas horas. También en versión la clase unida, la familia unida, los amigos unidos, los hermanos unidos... Le expliqué también que no todo el mundo piensa lo mismo y que esta y otras de las canciones pueden herir la sensibilidad de otras personas y no debe ir cantándola a voz en grito, pero eso se ve que cayó en saco roto.

Metro en hora punta, a esta madre con el cansancio acumulado del final de la jornada y los dos hijos peleándose no se me ocurre otra cosa que dejarles mi mp3, Parrulín me pide que le ponga esta canción y comparte los cascos con Xoubiña. A ella le gusta también la canción y los dos juntos comienzan a cantarla más alto de lo que deberían. De hecho la versión de la pequeña es aún mejor que la original.

¡El pueblo, hundido, jamás será vendido!

Me debato entre la risa y la vergüenza, al igual que el resto de los pasajeros. Un matrimonio mayor me mira con reprobación, el chico que está sentado enfrente no se debate, no, como no son sus hijos se muere de risa directamente.

Xoubiña afirma convencida que mañana se la va a cantar a su profe y a sus compañeros y protesta porque se acaba la canción. Y le dice Parrulín: Espera, que ahora viene el himno de Riego y se la enseñas también! Yo pienso tierra trágame, o nos detienen por escándalo público o los echan del cole o las dos cosas a la vez! El matrimonio mayor se ha marchado, el chico sentado enfrente está de verdad llorando de la risa y me dice: Veo que te han salido los niños bolcheviques (Del fr. bolchevique, y este del ruso bolshevik; literalmente 'uno de la mayoría'.) Le sonrío con cara de circunstancias y le digo: A menudo los hijos… se nos parecen.

Y recuerdo un concierto al que fui con mi madre hace unos años, en el 2002. Mamá, viene a Madrid un cantautor para un homenaje a la república o no sé qué que igual te gusta, si quieres vamos. Era Raimon y yo por aquel entonces no lo conocía, unos días antes me enseñó algunas de sus canciones. Mi madre estaba emocionada, nos fuimos al teatro Albéniz, antes de comenzar el recital vimos mucha gente del mundo de la cultura y de la política y mi madre estuvo hablando un buen rato con un mayorcísimo Carrillo. Pocas veces la vi disfrutar tanto como con el ambiente de aquel concierto. Cuando al finalizar todo el teatro nos pusimos en pie para cantar juntos Al vent fue increíble, todos vibrábamos al unísono, se ponían los pelos de punta. Se hubiera reído mucho mi madre al contarle con lo del metro, y le hubiera dicho: A menudo los hijos… se nos parecen… y los nietos también.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

viernes, 18 de marzo de 2016

Algo le pasa a mi héroe

Todos tenemos una mochila vital que llevamos a nuestras espaldas. A veces la llevo con ligereza, casi ni me doy cuenta que está ahí y otras veces… otras veces me pesa mucho. Mañana es el día del padre, recuerdo a mi padre, a mi héroe, y me pesa más de lo normal.

Yo tuve un padre que me amaba, que me llevaba al parque de atracciones y al zoo más que a ningún otro niño del mundo, un padre que me leía cuentos por la noche, que me enseñó a montar en bicicleta y a nadar. Un padre del que heredé la inteligencia y la ironía, los ojos grandes y la frente despejada. Heredé también la escasa estatura y una ligera sindactilia en los dedos de los pies.

Mi padre me transmitió su gusto por la lectura y su amor a la mar. Le gustaba leer libros de historia y viejos periódicos, lloraba cuando nos leía a Manuel Machado y reía a carcajadas con los Hermanos Marx. Cantábamos a gritos, jugábamos al parchís, al chinchón y a la escoba. Mentía a mi madre para saltarnos las dos horas de digestión, me enviaba cartas en las que incluía un Superhumor, me compraba un merengue o un milhojas los domingos. Mi padre era mi héroe.

Algo le pasó a mi héroe y en algún momento se perdió, perdió el rumbo de su vida, perdió el timón de su barco llevado consigo a toda la familia a la deriva. Y nos sumergió en los mares más profundos, en las noches más tristes, donde mora la melancolía, la infelicidad y el desamparo. Donde veía un héroe había ahora un hombre, sólo un hombre, con todas las miserias propias de un ser humano. Y nunca dejé de esperar que volviera el héroe.

El padre que yo añoro no es el padre que yo tenía, sino el que me gustaría que hubiera continuado siendo. Y es tan complicado de asumir y de entender como de explicarlo. Tenía 57 años cuando murió y yo tan sólo 21. Me prometió que cambiaría y yo quise creerlo una vez más, pero no tuvimos más tiempo. Apenas dos días después moría mientras yo le apretaba la mano para que mi héroe siguiera respirando. No pudo ser.

Padre, me gustaría haberte visto envejecer y haber recorrido ese hermoso camino junto a ti, junto al padre que me hubiera gustado que fueras. Hoy serías abuelo y llevarías orgulloso a tus nietos al parque de atracciones. Padre, Parrulín ha heredado tu inteligencia y tu ironía, tus ojos grandes y tu frente despejada, y se ha librado de la sindactilia y de la escasa estatura. Me emociono cuando veo a los abuelos mayores acompañados de hijos y nietos. Soy de lágrima fácil y eso también lo heredé de ti, de mi héroe.

En este día del padre, lleno para mí de melancolía y de morriña, os dejo con esta canción:



Mamá de Parrulín y de Xoubiña
Otro día más

Sean buen@s y felices

martes, 8 de marzo de 2016

En el día de la mujer: Tu hija es demasiado guapa para jugar al fútbol

Esto de tener hijos parece que otorga licencia para que todo el mundo opine y juzgue de su crianza, patente de corso para que cualquier persona pueda contarte sus experiencias aunque no las hayas pedido o darte consejos aunque no quieras oírlos. Bienintencionados la mayoría, otros puede que también aunque no lo parezca, y los hay que te sientan directamente como una patada en el culo.

He tenido que oír todo tipo de comentarios y opiniones acerca de la teta, del colecho, de portearlos… de darles chuches o no e incluso cuándo cortarles el pelo! Pero lo que nunca jamás había oído era un comentario acerca del fútbol. Todo tiene su primera vez, y en el fondo es el mismo tipo de comentario que oímos en reyes acerca de los regalos, pero la naturaleza humana nunca deja de sorprenderme.

Estoy en un curso de inteligencia emocional, es interesantísimo, me encanta y estoy absolutamente volcada en el curso. Peeero es los martes alternos de 4 a 6, era un estrés no tener con quién dejar a Xoubiña, pedírselo a una amiga, a la mamá de un compañero, esta que no puede, la otra que tampoco… Mira, la apunto a una extraescolar los martes y ya está. Miro los horarios, martes (y jueves) por la tarde, para infantil, a ver qué hay…

Cariño ¿Qué te parece si apuntamos a la niña a una extraescolar que me facilite ir a la educación emocional? Bien, ¿qué hay los martes? Danza y predeporte. ¿Qué es predeporte? En su día apuntamos a Parrulín, no le gustaba nada porque era básicamente fútbol y a él nunca le ha gustado el fútbol, aunque a Xoubiña sí le gusta el fútbol. ¿Y si la preguntamos directamente? ¿Xoubiña qué quieres baile o fútbol? Yo bailar, bailar. Listo! Apuntada queda.

Hablo con otra madre de la clase de Xoubiña que va a danza, me cuenta lo que tenemos que llevar, cómo son las clases… Me dice que una niña tan bonita como la mía está muy bien que esté en clase de danza. Me lo tomo a cumplido, pelín rancio pero cumplido al fin y al cabo. Su hija y la mía guardan ciertas similitudes, son las dos rubitas, media melenita, muy monas las dos, si tuviera que elegir la más parecida físicamente de su clase sería esta niña sin dudarlo. Me dice que la profe es un poquito exigente pero que está bien porque no están allí para jugar y ya me empieza un poco a escamar. Que tienen tres años! Que en el fondo lo que tienen que hacer es divertirse! (Eso, y dejarme ir a Inteligencia Emocional)

Lo de bailar seguro que a la niña le parece genial, lo de cumplir órdenes ya no lo veo tan claro, la verdad. Sin pensar, le digo a la otra madre: A Xoubiña es que le gusta lo mismo una corona de princesa que darle patadas a un balón, si no se adapta a la danza pues la cambio a fútbol y ya está! La madre me miró horrorizada, con los ojos a punto de salírsele de las órbitas, automáticamente yo doy un paso atrás y pienso ¡Ay Dios mío lo que he dicho! ¡He despertado al monstruo!

Que cómo se me ocurre ni siquiera pensar en apuntarla a fútbol! Que Xoubiña es demasiado guapa para jugar al fútbol! Las niñas tienen que apuntarse a danza para aprender a ser delicadas y femeninas! Ay va, la leche, que la desapunto antes de la primera clase! Jajaja!

Me faltaba decir que la mujer esta es rusa, no sé si vale como disculpa, pero rusa sí es, y alta y guapa, y bien vestida y bien maquillada, muy cuidada en su aspecto personal y ama de casa. Es la única rusa que conozco así que no sé si se trata de verdad de algo cultural o si es exclusivo de esta mujer. Aquí hay muchas niñas en fútbol pero en mi país ninguna niña juega al fútbol ni hace boxeo porque ¿Cómo le va a gustar a un hombre una mujer así? Muda me quedé, me salvó la campana y subimos a buscar a las niñas a clase de danza. Muda, menos mal, porque si hablara… Si hablara le diría lo siguiente.

No voy a educar una hija cuya meta en la vida sea gustar a un hombre, hasta ahí podíamos llegar! Tampoco que sea delicada en el sentido de necesitar la protección de un hombre! Será femenina si está en su carácter y si no, no, será lo que ella sea, pero que sea feliz en primer lugar!

Disfrutar jugando al fútbol con un tutú morado, jugar a las chapas con unas alas de mariposa, atacar el castillo de playmobil con un ejército de guerreros montados sobre unicornios, todo eso es maravilloso y es propio de una niña de tres años sana y feliz. Y si sólo quisiera llevar pantalones y jugar con coches, también sería maravilloso! Y si sólo quisiera ir vestida de rosa y ser princesa, también sería maravilloso!

Ya está bien de clichés, de machismo y de sexismo, por favor! El machismo es una lacra de la sociedad, pero es que cuando además proviene de una mujer es el colmo! Tu hija es demasiado guapa para jugar al fútbol. Lo que hay que oír, por favor! Delicada y femenina! Pues lo que me faltaba! Es femenina, más que yo, de delicada tiene entre poco y nada, y es una niña feliz que siempre está sonriendo, que es lo que de verdad importa.

Aunque me salvó la campana no habría contestado, nunca contesto a este tipo de cosas, hay veces que con oír y callar es suficiente. Pero me he quedado con una duda muy grande que no sé si algún día resolveré. ¿Si mi hija no fuera “demasiado guapa” sí podría jugar al fútbol? ¿Las feas pueden jugar al fútbol? Es como el mundo al revés esto, rancio, desfasado, antiguo, un machismo intolerable que además proviene de una mujer!

En el día de la mujer vamos a intentar empezar nosotras mismas por el valor que tenemos, porque con mujeres como la rusa, quién quiere enemigos!

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.

Otro día más.

lunes, 1 de febrero de 2016

1 de febrero: Tiempo para ser mejor madre

Margaux entre copines

La maternidad es algo fantástico, una etapa fundamental de la vida que debemos disfrutarla al máximo y exprimirle todo el jugo posible, reír, jugar, disfrutar y amar cada día a nuestros hijos con toda nuestra alma. Pero también es cierto que el exceso de obligaciones puede llegar a agobiarnos en ocasiones, a no disponer de un minuto para nosotras mismas ni para la pareja.

Sin apenas darnos cuenta llega el día en el que las raíces de tu pelo no tienen nada que envidiar a las de un gran árbol del botánico, los pelos de tus piernas te hacen parecer el yeti, las ojeras se han instalado de forma permanente, y tu marido… tu marido es un compañero de piso al que apenas ves, con el que hablas cinco minutos para recordarle que mañana el niño tiene judo, la niña tiene que devolver el libro de la biblioteca y poco más.

Y recuerdas cuánto te gustaba alisarte el pelo con el secador, las piernas siempre suaves y depiladas, la raya en el ojo y un poquito de rímel, y ese hombre del que te enamoraste por su conversación, aquellas noches de largos abrazos hasta caer rendidos, los dos solos en la cama.

Este fin de semana he tenido el placer de salir a cenar con dos amigas blogueras, Yaiza y Nereida, y ha sido fantástico. Hemos ido a un gallego, no podía ser de otra forma, y hemos hablado sin parar. A ninguna de las tres nos callan ni debajo del agua, y hemos cascado como si no hubiera un mañana. Compartimos risas y confidencias durante horas.

Ellas venían a un evento blogger de este fin de semana y han tenido la amabilidad de quedar además conmigo. Lo han pasado fenomenal en el evento, volvían a su casa cansadas pero con las pilas cargadas, llenas de regalos y experiencias nuevas, la verdad es que me han dado cierta envidia sana. También estuve con ellas en la estación antes de coger el ave. El estar un par de horas más con Yaiza el domingo, rajando sin parar y sin niños, ha sido un placer que tampoco esperaba, así como conocer por casualidad a dos papás blogger que me han caído estupendamente.

Y es que todas necesitamos un tiempo para ser mejores madres, es volver a casa deseando abrazar a tus hijos, con la mente despejada y el corazón contento, es la novedad de echarlos de menos. Es fundamental tener tiempo para nosotras, en mi caso es tan fundamental como inusual. También es importante disfrutar a solas de tu pareja, esto vamos a tener que esperar un poco más porque no tenemos con quién dejarlos para irnos un fin de semana juntos, que tanta falta nos haría. Es fundamental, pero imposible de momento. Tendremos que encontrar otra forma para cuidarnos mutuamente.

Diez minutos a solas para alisarme el pelo alguna noche, veinte minutos a solas para dejarme las piernas decentes algún fin de semana, cinco minutos a solas para pintarme alguna mañana… No es mucho lo que pido, sólo algo de tiempo para mí, de desconexión de obligaciones maternales. Y muchas veces no es la falta de tiempo, sino de ganas, si tengo diez minutos libres me siento en el sofá a no hacer nada, por puro agotamiento, en lugar de dedicármelos a mí misma.

Salir alguna vez con mis amigas, recuperar las amistades perdidas, crear una nueva comunidad de vínculos afectivos, tener mi propia tribu. Cuidarme en aquellas rutinas también perdidas con las que tanto disfrutaba. Dedicarnos un poco de tiempo para nosotras mismas es fundamental, no es egoísmo ni nos resta puntos en la carrera de la maternidad, que parece a veces una lucha autoimpuesta por ser la mejor madre. La verdad es que dedicarnos tiempo para nosotras nos hace ser mejores madres, es coger las obligaciones con más ganas, es dedicarles tiempo de más calidad y dejar de sobrevivir al día a día para vivir el día a día.

Ser madre no significa tener que renunciar a la vida que llevábamos antes, asumir todos sus sueños como nuestros y aparcar los proyectos de vida hasta cuando dispongamos de más tiempo, no es dejar pasar la vida propia mientras cuidamos de la ajena. Entregarse a los hijos no implica desprenderse de todo lo demás. Porque su infancia pasa mientras la disfrutamos pero si miramos atrás sería una lástima haber dejado pasar también la treintena sin haber disfrutado de nosotras mismas.

Lo anotaré en la lista de des-propósitos de este año, la creación de vínculos y dejar de sobrevivir para vivir, ya puedo ir borrando los que no he cumplido y actualizando los que van por buen camino, pero a estos hay que hacerles un hueco. Aunque sea 1 de febrero…

Mamá de Parrulín y de Xoubiña,
Sean buen@s y felices.

Otro día más.